RECOMENDACIONES PARA
EL ESTRÉS
El pensar positivo, evitará
alterarse y perder el control de la situación en determinado momento, es
necesario replantear como van marchando las cosas, causas, posibles soluciones,
preparándonos para cualquier imprevisto que acontezca, así el estrés será menos
impactante y sus efectos menos dañinos, cuando hablamos de estrés no
beneficiosa, el demasiado estrés, resulta peligroso, por esto lo debemos
controlar paulatinamente, para no padecer sus consecuencias El estrés benéfico,
es una respuesta normal del organismo ante situaciones peligrosas, segregando adrenalina, preparando el cuerpo
para la acción, en estado de alerta, para responder oportunamente, poniendo a
salvo la vida. El problema del estrés es cuando lo padecemos a diario, el
cuerpo en estado de alerta, a la defensiva y creando en forma subconsciente la
preparación del cuerpo para el estado de acción. Conscientemente, padecemos
estrés cuando sabemos que alguna situación puede alterarnos y no buscamos la
forma de ir cambiando la forma de ver las cosas, por ejemplo el ganarse la lotería, el casamiento, el
reencuentro con familiares y amigos, produce estrés e innumerables cosas o
episodios negativos, dolorosos y desagradables, también lo producen. La mente
no establece diferencias entre hechos reales e imaginarios, la forma de ver el
pasado y de crear el futuro, provoca estrés, por lo venir. El nivel óptimo del
estrés es cuando aumenta este, y se incrementa el rendimiento y la salud, es su
fase positiva; cuando el estrés aumenta y se deteriora la salud, tenemos su
fase negativa; la fase positiva del estrés es mantenerse optimista, vital,
resistente a la enfermedad, ágil
mentalmente, productivo y creativo; no es suprimir al estrés porque no
es posible, ni conveniente, sino agregarle la fase positiva.
Recomendaciones para el
estrés: entre los métodos para combatir las tensiones físicas y psíquicas está
el contar hasta diez en voz baja, respirando al mismo tiempo profundamente, se
consigue tranquilizarse y dedicar tiempo al ocio, encuentro con amigos, lectura,
escuchar música, cine , baile, cenas fuer de casa, deportes. Otras ayudas: la
aromaterapia, cosiste en darse un baño
relajante con aceites de manzanilla, lavanda, rosa, sándalo o geranio. La musicoterapia, ayuda en aprender
a tocar un instrumento, escuchar música preferida
y relajante. La respiración como método relajante: con la respiración rítmica,
el cerebro es mejor nutrido, porque la sangre se oxigena adecuadamente, se
coordinan los pensamientos. La gimnasia respiratoria: ejercicios de estiramiento
acompañados de inspiraciones y expiraciones del aire, esto provoca
rectificación de las curvaturas de la columna vertebral y llena los pulmones de
oxígeno. No existe la fórmula para curar el estrés, pero organizando mejor las actividades,
se pueden evitar tensiones como por ejemplo, no acumular actividades y no dejar
todas para última hora; establecer prioridades, aprender a decir no, a lo que
no se pueda cumplir, asumir grandes
retos paso a paso. El ejercicio físico y las técnicas de relajación son las
formas de distensionarse y mejorar el sistema cardiovascular; la risa es beneficiosa,
se dice que es la mejor medicina, influye en el estado físico y emocional,
dícese que cinco minutos de risa, equivalen a cuarenta y cinco minutos de
ejercicios aeróbicos. La solución es saber que situaciones estresantes las vas
a encontrar a diario, siempre hay solución a todo, por difícil que parezca,
evite estas situaciones o aprenda a sobrellevarlas, haga cambios de estilo de
vida y de alimentación y pensar positivo todo el tiempo.
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