Este artículo de la escritora
Maggie Jackson, de su libro DISTRAÍDOS, nos lleva a la realidad actual, donde
habla de la distracción, en casi todo el mundo, parece un virus, a convertirse
en pandemia, no le prestamos atención a nada, nos es difícil concentrarnos
en algo, en el trabajo, estudio, etc. no existen relaciones familiares, estamos
muy ocupados, no comemos en familia, unos en Facebook, otros haciendo tareas en
su portátil, seducidos por el mundo virtual, la tecnología, haciendo miles de
cosas al tiempo, en constante movimiento, sin prestar atención a lo cotidiano,
muchas veces con pequeños detalles que pasan inadvertidos. El atender a
tantas cosas al mismo tiempo, atendiendo en primer lugar al PC, en mirar el
email, responder mensajes, el celular, la casa en orden, el mercado, los hijos,
el esposo en último lugar.
Entre más
jóvenes son, más distraídos. Toman en cuenta solo lo personal, las otras
cosas de la casa, en segundo plano, a veces son un estorbo; en el trabajo, les
ocurre igual, se desconcentran en sus proyectos, por estar pendientes al
celular, PC, a todo lo virtual, que es lo más importante en su mundo.
Concluyen
algunos lectores del libro que por la forma en que la gente trabaja, estudia y
vive la vida en general, se nota “que la memoria es el talón de Aquiles de los
ejecutivos, que pretenden hacer muchas cosas a la vez”. A la hora del almuerzo,
como tienen poco tiempo, comen un sándwich, sin saber a qué sabe lo que come,
está pensando en el trabajo que tiene pendiente y del poco tiempo que dispone.
La autora
critica que la gente prefiere lo ficticio, llevan “vidas paralelas”, mundos
virtuales, en internet tienen un sinnúmero de seguidores, en sus web, se
pregunta ¿si eso es desarrollo?, enamorados de la tecnología, que nos roba la
vida verdadera para introducirnos en mundos virtuales. Piense que al ver a los
niños de hoy, conocer tanto sobre tecnología, quienes prefieren conversar con
el grupo de amigos en las redes sociales, pues todos se comunican al tiempo, no
tienen conversaciones personales, con las amistades o la familia, no hay
tiempo, hasta los noviazgos por internet, dicen ser más seguros. En el libro
“Authenticity”, de James Gilmore y Joseph Pine, describen “el surgir de la
economía que se transforma de servicios a experiencias, los computadores
dejaron de servir para lo mental, para convertirse en satisfacción corporal”.
Cómo
aprenden en las escuelas, con tanta distracción en internet y en sus
investigaciones todo es “copia y pega”, ya está todo listo, no hay necesidad de
investigar, todo está en internet; no hacen resúmenes, argumentos, etc., ¿qué
aprenden de gramática, ortografía, si no leen? Se requiere con urgencia crear
modelos de atención a seguir, los padres y educadores tienen la tarea de volver
al tiempo donde no había tanta tecnología que distraiga e hiciera todas las
tareas; lo que sucede es que se ha enfocado mal toda la información de la
tecnología actual, en que todo está listo, no hay que estudiar, ni memorizar,
ni investigar, ni atender, ni concentrarnos, absolutamente todo está para
utilizar.